Bajas de luz permanentes y apagones de 3 y 4 horas son el pan de cada día en el Municipio Bolívar.
Habitantes aseguran; "Vivimos en zozobra rogando a Dios que no ocurra un apagón en horas productivas para los habitantes de las tres parroquias".
Se dañan los artefactos eléctricos del hogar por tantos bajones y apagones imprevistos, ¿quién los paga?.
Exigimos a corpoelec soluciones a corto plazo, puesto que la situación es caótica e imposibilita el libre desarrollo de trabajadores y el comercio en general.