*Según la información extraoficial, el ahora detenido, identificado como Jesús Eduardo Ramírez Márquez, de 38 años de edad, se enfrascó en una fuerte discusión con su ex mujer,a la que ofendió y maltrató verbalmente, para luego alejarse, por lo que la mujer de inmediato se encerró con llave.
César Vilamizar Trejo.- Un sujeto que , tras discutir y ofender a su mujer, optó por lanzar varias piedras contra la residencia donde ella vive, fue aprehendido por funcionarios del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana, en hecho ocurrido la madrugada de este jueves, en la calle principal del barrio Industrialito, parroquia Rómulo Betancuort de esta ciudad.
Según la información extraoficial, el ahora detenido, identificado como Jesús Eduardo Ramírez Márquez, de 38 años de edad, se enfrascó en una fuerte discusión con su ex mujer, a la que ofendió y maltrató verbalmente, para luego alejarse, por lo que la mujer de inmediato se encerró con llave.
Al filo de la medianoche, de acuerdo a testimonios, Ramírez Márquez regresó pero con aires de mando y con palabras subidas de tono para exigir, desde afuera, que abriera la casa, pues de lo contrario se iba a arrepentir. Aquella amenaza no causó reacción en la dama, quien prefirió seguir tranquila en su hogar.
Luego de tanto exigir en vano, a Jesús Eduardo lo único que se le ocurrió fue tomar varias piedras para lanzarlas contra la casa, si respetar a su ex y a los vecinos, quienes le pidieron que se marchara y viniera después con calma a dialogar con su ex mujer, pero Ramírez estaba tan enardecido que no prestó atención a ese consejo.
Ocurrió que cuando estaba listo para lanzar, cual Luis Tiant en sus mejores tiempos, una de las tres piedras que tenía en su poder, una comisión del Cpnb le dio la voz de alto, por lo que el «lanzador» se paralizó cuando tenía el brazo derecho levantado, a punto de tirar. Así se quedó unos segundos, hasta que los uniformados procedieron a calmarlo y trasladarlo a la estación policial de esa zona.
Ramírez Márquez, después de lanzar rectas y curvas, fue arrestado y, en lugar de seguir ´»pichando piedras», fue puesto a disposición de la Fiscalía 17 del Ministerio Público por encontrarse incurso en uno de los delitos contemplados en la ley orgánica sobre el derecho de una mujer libre de violencia.