Los vecinos residentes de la avenida Mariño de la parroquia San Blas tienen dos años solicitando a Corpoelec que cambie un poste que está fracturado.
La autoridad de la empresa prestadora de servicio no ha dado respuesta. La situación mantiene preocupado a los habitantes, quienes temen que en cualquier momento se desplome junto al tendido eléctrico .
«Estamos corriendo riesgo. Necesitamos que nos resuelvan de manera inmediata».
Datos suministrados por Jhonny Cotuffo: